Fundadora y Presidenta de LPAP A.C. y autora del libro “Todo va a estar bien”

32 años

La fuerza tiene rostro de mujer.
Nayeli es preciosa. Su semblante llena cualquier habi­tación. Mide un metro y cincuenta y seis centímetros, pero es enorme. Al verla uno se pregunta: ¿Alguien así puede sufrir? ¿Llora? El corazón de Nayeli abarca caminos desbordados de dolor e incertidumbre que ha superado.

Ahora los contempla como experiencias que le han enseñado a valorar los momentos por los que vale la pena vivir. Su hijo, Luis Pablo, se volvió un sím­bolo de lucha en el mundo. Fue amado y miles oraron por su salud.

Pero, ni todo el cariño de varios países se compararía con el amor que ella le profesa. Ella jamás se ha visto como una víctima. Su hijo, que lo soportó todo, le enseñó que a esta vida no se viene a perder. Sabe que él le dice “tu manera de honrarme es siendo feliz”.

POR QUETZALI GARCÍA, EDITORA